Monday, December 21, 2009

La conspiración para asesinar a Christian Poveda

El domingo 30 de agosto lo esperaron durante tres horas. Desde las tres hasta las seis de la tarde. Estuvieron apostados en una ermita del cantón El Rosario, en Tonacatepeque, esperando a “el Chele”, “el Amigo”, pero Christian Gregoire Poveda no llegó. Para la clica Shadow Park Locos su ausencia confirmaba un rumor que investigaban desde 28 días antes: el periodista franco español filtraba información de la pandilla a la Policía.
-El chamaco que llega allí y que les trae ropa y todo -habría dicho el agente del 911 Juan Napoleón Espinoza Pérez, según documentos judiciales- tiene unos vídeos y los ha ido a entregar a la Policía de Soyapango.
La Fiscalía no tiene una fecha exacta, pero asegura que la conversación entre el policía y el prófugo Raúl Antonio Rivera Elías, fue al calor del alcohol, la última semana de julio, justo cuando Poveda viajó hacia México. Según los registros de la Dirección General de Migración y Extranjería, salió del país el 23 de agosto. Durante una semana estuvo en la ciudad de San Luis Potosí, donde participó en el taller “Fotografía documental y Ética”, invitado por Mauricio Palos, quien hace dos semanas estuvo en San Salvador.
Espinoza Pérez residía en el cantón El Rosario y se graduó como policía en 1996. Durante la última década su nombre aparece consignado como el captor de implicados en robos y homicidios, principalmente. Antes de ser agente, trabajó en un pequeño taller regentado por su padre. Él acepta que conoce a los detenidos por el crimen, pero niega acercamientos con ellos “Al señor (Poveda) no lo conocía, nunca lo conocí. Aquí que se investigue porque solo han hecho capturas, por lo menos conmigo (...) Lo que pido es investigación, pero investigación real que de con los verdaderos culpables”, dijo en septiembre pasado, al noticiero Cuatro Visión.
“Van a pensar que somos malos”
Cuando regresó en el vuelo 231, la tarde del domingo 30 de agosto, la pandilla había tomado la decisión de secuestrarlo y cuestionarle sobre el destino de los videos. Para esa fecha ya habían pasado tres meses de que Miguel Ángel Ortiz, “el Cholo”, había sido filmado con un revólver y una granada. José Alejandro Melara, el líder de la clica –el palabrero-, mostró su desacuerdo.
-No seas pendejo. No saques esas babosadas.
Un palabrero es el que decide si salen o entran armas al territorio que controla la pandilla, decide las fechas de cuándo se van a realizar “los tiros”, esas tres palabras terminadas en la primera conjugación verbal: matar, extorsionar, robar...
Melara, siempre dirigiéndose a “el Cholo”, argumentó su orden:
-No saques esas babosadas no ves que estos videos van para otra gente que nos quiere ayudar, van a pensar que somos malos.
-Lo que acaba de hacer este lo voy a borrar allá, matizó Poveda.
-Mejor tráigame ese video para mi y lo voy a guardar de recuerdo, pidió “el Cholo”
-Te lo voy a traer cuando ya lo haya sacado.
Poveda sabía que las pandillas son organizaciones estrictas y quien no cumple las reglas se la juega. Durante la promoción del documental La Vida Loca, en una entrevista que concedió en España, hablaba sobre el pacto que le permitió realizar su trabajo: “La proposición de pasar un año como mínimo a diario les interesó mucho y la segunda cosa dentro de mi propuesta era no contar lo que es una pandilla, cómo está formada, qué tipo de actividades, y ese tipo de cosas no me interesaba. A mi lo que más me interesaba era el aspecto humano, quienes son, por qué un niño de 12, 13 años se vuelve un asesino y está dispuesto a morir antes de los 20”.
Las autoridades dicen que la fisura del acuerdo tiene múltiples variables. El fiscal Torres dice que la clica de La Campanera estaba resentida porque Poveda canalizaba más ayuda a los pandilleros de El Rosario; el subdirector de la Policía, Howard Cotto, agrega “fricciones” por el contenido del documental La Vida Loca: unos querían un nuevo filme para limpiar la imagen de la pandilla, otros consideraban que nada debía mostrarse a la opinión pública.
“Estaba ahuevado”
Cuando Poveda se fue hacia México, la copia pirata de La Vida Loca ya estaba en las calles de San Salvador. A dos coras. El jefe de la División Antihomicidios, Marco Tulio Lima, dice que esa comercialización ilegal habría generado las primeras diferencias: “Lo cierto es que (los pandilleros) se dan cuenta que se ha publicado el hecho, y parece ser que ellos no están de acuerdo en que se haya publicado el hecho en ese momento sin antes haber visto los mecanismos de cómo se va publicar”.
Quizás por las copias ilegales, quizás por reclamos de los pandilleros. Antes de su viaje, Poveda se notaba triste. “La última vez que lo ví estaba todo barbudo y estaba como ahuevado, no sé, deprimido, eso fue lo que percibí y estuvimos hablando un buen rato. Lo único que me comentó es que varia gente le había dicho que ya había visto la película pirata, entonces, solo le dije que tuviera cuidado. Él estaba preocupado, pero no lo admitía, no lo iba admitir”, cuenta un fotoperiodista que trabaja para una agencia extranjera.
La Fiscalía asegura que la comercialización pirata del documental provocó una reunión entre Poveda y los pandilleros. “Le preguntan que fue lo que pasó con el acuerdo si se dijo que la película iba ser exhibida nada más fuera, que si podía hacer algo para parar esa situación y creo que Christian Poveda no podía hacer nada, acuérdese que con la piratería nadie puede venir a tratar de pararla... eso fue algo como que ya no les gustaba mucho”.
Pero faltaba otro factor más determinante en la resquebrajada relación del periodista con la pandilla. 21 días antes de que Poveda saliera del país, el domingo dos de agosto, Melara reunió con la clica en la finca El Arbejal, en el cantón El Rosario, una loma tupida de vegetación, con dos hondonadas. Ahí, Melara informó sobre la supuesta conversación que, unos días antes, había sostenido el policía con uno de los pandilleros de la zona.
Lejos de apuntar el dedo acusador contra Poveda, la pandilla cerró filas a favor del documentalista: “Es buena onda”, “Nos ayuda”. Por esas buenas referencias, los pandilleros acordaron que lo mejor era investigar y consultar telefónicamente con líderes recluidos en varios penales. Según la investigación fiscal, en los siguientes días se realizaron otras tres “meeting” (reuniones) sobre la sospecha que pesaba contra Poveda. Eran reuniones, dice el fiscal Torres, a la intemperie. La decisión definitiva sobre el caso fue el 30 de agosto, cuando Poveda no llegó a El Rosario.
“La misión fue realizada”
A las tres de la tarde del domingo 30 de agosto, Melara informó a unos ocho pandilleros que ya tenía el aval de “El tabo” (los centros penales) para proceder contra Poveda. Sin más rodeos ni preámbulos, comenzó la planificación: Roberto Luis Romero, “el Tiger”; Miguel Ángel Ortiz, “el Cholo”; y Raúl Antonio Rivera Elías, “el Killer”, tenían que secuestrarlo y cuestionarle sobre su supuesta colaboración con la Policía, pero por su compromiso en México, el periodista no llegó.
-El rumor es cierto, habría concluido Melara.
Y enumeró algunas razones de su conclusión: Poveda llegaba los domingos y se reunían cerca de la ermita, cuando no lo hacía les llamaba telefónicamente para informarles de su inasistencia. Pero a las seis de la tarde de ese 30 de noviembre, los pandilleros regresaron a sus casas sin ninguna noticia de Poveda.

Friday, December 04, 2009

Del éxtasis a la cárcel

La primera vez que un policía encubierto se reunió con Simoes Javier de la O Merlos, ex asesor de la Policía Nacional Civil (PNC), fue el 7 de abril de 2008. Se sentaron alrededor de una mesa, frente al baño público del casino Bingo, sobre la calle Chiltiupán, en Santa Tecla. Ahí inició una negociación por 50 pastillas de éxtasis que, ahora, tiene al abogado encarcelado y con una resolución adversa que ordena enjuiciarlo por tráfico ilícito de drogas.
La defensa del abogado ya había logrado el cierre del caso por supuestas fallas en la custodia de las evidencias (ver nota segunda). Sin embargo, tras recibir un recurso de apelación de los fiscales, la Cámara de lo Penal de Santa Tecla ordenó el juicio. Hace dos días, el Juzgado Segundo de Instrucción de esa ciudad realizó una audiencia especial, mandó el expediente a un tribunal de sentencia y confirmó la detención provisional contra el abogado.

Tuesday, September 22, 2009

La deuda de la familia Deprez

Cuando el supuesto protagonista de una estafa se entregó a la justicia, el 26 de junio pasado, algunos de sus terrenos ya no estaban a su nombre. Esa es la razón que tiene entrampado el embargo de dos millones de dólares que el Juzgado Especializado de Santa Ana ordenó contra el francés Andre Leopold Deprez Damman y otros diez procesados por timar a unas 600 personas con falsas lotificaciones.
"Una porción del inmueble ubicado en el cantón Caña Brava, Coatepeque, ya no es propiedad de ninguno de los imputados". La resolución del Centro Nacional de Registro (CNR) se refiere a un terreno de 25.471 metros cuadrados que la inmobiliaria Jumbo vendió por $36,800, un mes antes del estallido que terminó con los días relajados que la familia Deprez vivía a las orillas del lago de Coatepeque. Cinco están presos y dos prófugos.

Monday, September 07, 2009

El pueblo de la oposición ausente

El municipio lleva el nombre de Las Flores, pero en ese pueblo repoblado hace 23 años no se ven jardines. Afuera, lo que se mira es una sucesión de colinas, árboles con hojas blancuzcas por el polvo de la maltrecha calle y unas banderas rojas; adentro, un pequeño poblado de casas mixtas, calles pavimentadas y postes con más banderas rojas. Ahí hay propaganda de un solo partido: el FMLN.
—¿Por quién va a votar?
A Yanira Cartagena, una joven que votará por primera vez, la pregunta le sorprende. Ella trabaja en el comedor comunal La Asunción, de cuyas paredes cuelgan dos calendarios con imágenes del jesuita Jon Cortina, calcomanías contra la explotación minera, afiches de personas asesinadas durante la guerra y, al fondo, un mural que reivindica la igualdad de género.
“Es obvio.” Lanza una mirada de extrañeza y concluye: “Obvio que por el Frente”.
La misma interrogante se lanza a Marta, a María Victoria, a José, a Carlos. En el comedor, en la calle y en una tienda frente al parque se escucha la misma respuesta. Es, quizás, por esa razón que Félix Moisés Lara, alcalde desde 1997 y aspirante a la reelección, considera innecesario tapizar los postes con su imagen de salvadoreño bien plantado: moreno, bigote espeso.
“Creo que ARENA va a sacar siete votos, el PCN tres y el PDC ninguno. Se va recordar lo que le he dicho en este pavimento cuando vea los datos.” Su predicción de un triunfo arrollador es una posibilidad respaldada por los resultados de los últimos comicios. La única vez que ARENA sacó más de 100 votos fue en las elecciones de 1994, pero eso no sirvió de mucho porque Manuel Cartagena cuadruplicó los resultados, 422 votos. Fue el primer alcalde efemelenista. Luego, el partido oficial siguió perdiendo terreno: en 2003 logró 13 votos y en 2006 solo ocho. Al otro lado, el FMLN subió de 541 a 646.
Oposición abstraída
Sobre Wilfredo López se conocen pocas cosas. Acaso, que vive en Chalatenango, que labora en el juzgado de Paz, que es candidato a la alcaldía por ARENA y que es difícil encontrarlo en su lugar de trabajo. Es un candidato atípico: nadie recuerda un mitin con sus promesas, no tiene sede ni brigadas para realizar pinta y pega. No hay, en el pueblo, ningún rastro proselitista de él o de su partido.
El candidato pecenista tiene menos suerte. La gente no da referencias ni de su nombre. “Ni por rumores se acerca aquí”, resume Marta Castro.
Con ese panorama, las posibilidades del cambio de alcalde y del modo de vida en Las Flores parecen remotas. El municipio seguirá con una organización peculiar: el cooperativismo.
La cooperativa Los Almendros y la Asociación Comunal San José Las Flores mueven los hilos del desarrollo. Gracias a la cooperación europea —de España, en especial—, la primera tiene proyectos de ganadería y diversificación agrícola (cítricos, loroco, nances) y la segunda administra un turicentro a orillas del cristalino río Sumpul. “Nadie, ni el Frente, nos va a decir cómo vivir”, dice el alcalde.

Wednesday, August 19, 2009

Lo que dicen y lo que callan en La Herradura

A los pobladores les gusta decir que el Estero de Jaltepeque es refugio de garcetas de alas azules, que el bosque salado tiene dimensiones incuantificables y que, bajo el sol abrazador de la costa, el paseo en lancha es una experiencia inolvidable.
El discurso y las facciones de los que hablan cambian cuando las preguntas son para obtener información sobre la casa que está al final de la calle del caserío La Tojona. Ahí vivía Julio, ahí una decena de policías antinarcóticos llegaron en noviembre del 2008 buscando pistas sobre un caso de narcotráfico.
"Es totalmente desconocido para mí eso que dicen los noticieros". La que habla es una vecina de Julio, una señora de unos 40 años que usa lentes. Lo único que recuerda del ahora prófugo de la justicia es que tenía dos lanchas y se dedicaba a la venta de chacalín y camarón.
San Luis La Herradura es un pueblo asentado en una planicie, dividido por una estrecha calle asfaltada. Al final, a 64 kilómetros de San Salvador, está un embarcadero. Un manglar a un lado, más manglar al otro y una que otra lancha deslizándose por esas aguas de color indescifrable... tan indescifrables como los indicios que Fiscalía y Policía tratan de confirmar sobre el tráfico de drogas en la zona.

Tuesday, August 04, 2009

La cárcel de las musas

La casa de esquina color celeste tenía un rótulo con luces de neón: Musas Video Bar. Adentro, una tarima con una barra metálica al centro y chicas bailando en faldas cortas de tela flexible. Ahí, entre un mar de gente, cerca del Redondel Masferrer, al norte de San Salvador, a Raquel la privaron de libertad durante 15 días y casi nadie se dio cuenta.
Llegó como una bailarina, ilusionada por el anuncio de trabajo que salió publicado en El Nuevo Diario de Nicaragua -"excelente salario, más de $1,000 al mes, más comisión"-. Terminó, sin embargo, coaccionada a ser la compañía de desconocidos: tenía que fichar, convencer a los clientes para que la invitaran a un trago de siete dólares (cinco eran para Jorge, el dueño de la barra show, y dos para ella).
Un día, cuando una camioneta roja, marca Toyota, modelo Prado, la trasladó al night club Caprichos, sobre la primera calle poniente de la colonia Escalón, el trabajo se transformó en algo que nunca le mencionaron cuando fue entrevistada por Leticia, en el hotel nicaragüense La Palmera: además de fichar, tenía que prostituirse por 30 dólares (siete para Franklin, dueño de ese negocio, y $23 para ella).
¿Por qué no escapaba?. Por la noche, dormía en un cuarto bajo llave; por el día, Raúl, el encargado del bar, y Evelio, el vigilante, seguían sus pasos para que no saliera del negocio. La misma situación enfrentaba Julia. Y Jessica. Y Silvia. Las tres menores de edad, las tres con una baja autoestima -según los peritajes del Instituto de Medicina Legal- por esa historia de prostituición enmascarada con una promesa de baile.
"Tantas cosas que me han pasado que he tenido deseos de morirme", le dijo Raquel, originaria de El Chontal, a un psicológo del IML. Apoyada por la Fundación Huellas y por la Organización Internacional para las Migraciones, la joven fue repatriada a Nicaragua. Jessica y Julia fueron remitidas al Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la Niñez y la Adolescencia (ISNA), pero dos días después de su ingreso, escaparon. De Julia, nadie da referencia...

Monday, July 27, 2009

La hora de la última palabra

27 de julio 2009. 10:00 AM. San Salvador ameneció sin nubes y sin rastros de invierno. Hay sol, calor y una luminosa mañana tras el vidrio oscuro del ventanal de la sala 2A de los tribunales. Y la Fiscalía dice que la demanda contra Fredis Osmín Escobar Alvarenga tiene la misma claridad de la jornada. "Decir que no se cumple con la tipología de lavado de dinero es como decir que no se ve el sol de este día", dice Arturo Magaña, fiscal.
Escobar Alvarenga es un comerciante de Pasaquina. Para su cuñado es una persona que tiene "estrella" para los negocios, hace 15 años fue uno de los primeros en importar ropa desde Panamá y acaparó a los clientes de Santa Rosa de Lima "porque el que pega primero, pega dos veces"; para la Fiscalía, sin embargo, es un tipo que lavó $8.3 millones y evadió impuestos. Por eso, piden condenarlo.
Fredis toma apuntes, susurra algo con sus defensores. Casi al mediodía, después de un largo discurso de fiscales y defensores, llega la hora de su última palabra. "Me da sentimiento", su voz de resquebraja, pero sigue: "Tal vez el error mio es querer ostentar y en este país no se puede. Por querer tener algo fino me están procesando". Los jueces lo miran, lo escuchan y, al concluir, le prometen que dentro de 72 horas resolverán el caso.

Friday, July 24, 2009

"Me han tratado como sí Pablo Escobar salió de la tumba"

Antes de ser encarcelado por lavado de dinero, la sospecha de contrabando y evasión de impuestos lo seguía como a su sombra. Él lo sabe, lo acepta, lo matiza, lo reduce a un desorden contable de su empresa, la Importadora de Productos Mexicanos.
La primera vez que intenté abordarlo, esa mañana del 19 de julio de 2009, Fredis Osmín Escobar Alvarenga caminaba por un pasillo judicial con grilletes y con las manos esposadas. Sin dejar de caminar dijo tímidamente que aclararía "todas las cosas al finalizar el juicio". Pocos minutos después, regresó a la sala 2A de la misma forma en que había salido, con el mismo guardia a poca distancia de su espalda.
El comerciante, el ganadero, "El gran amigo de Pasaquina" -según su corrido- lleva dos semanas de estar sentado frente a tres jueces del Tribunal Tercero de Sentencia. Su delito, según la Fiscalía, es que $8.3 millones que circularon por sus cuentas no tienen respaldo legal. Él intenta desvirtuarlo. En un receso del juicio, esto dijo:
- ¿Por qué cree que lo involucran en lavado de dinero?
El desorden que puede haber, de lo que ellos tal vez hablan es de que es un desorden administrativo en el sentido de que el dinero en vez de llegar a la empresa llegaba a la cuenta mía, pero eso no constituye un delito ni nada. Además, el dinero siempre era reflejado en un cien por ciento, sí se cobraban cien pesos, aunque se depositaran en mi cuenta, esos cincuenta dólares eran reflejados en la contabilidad de que se había cobrado cien. Entonces, yo soy el dueño del 90 por ciento de las acciones, soy el propietario, soy el que manejo y decido de todo, en todo caso tendría que haber sido mi socio el que a mí me demandara, pero como yo soy el dueño y como dice un dicho que sí la vaca es mia son mios los becerros. El que pone y dispone lo de la empresa soy yo.
- La Fiscalía insiste que ese dinero no tiene respaldo legal.
Para nada, es algo administrativo, no penal, como le repito, en todo caso, tendría que ser mi socio el que tendría que demandarme, pero sí yo soy el dueño de la empresa, el que manejo, el que pago, entonces, por eso me tienen aquí, por venir y defender lo mío.
- Pero el proceso ya ha sido avalado por dos jueces...
No sé, tal vez habrán otros intereses algo que no les parece, que un salvadoreño normal como cualquiera, como usted, que no tengo un apellido grande se pueda superar en este país, aquí es un delito ver a alguien que se va superando, de ver que alguien anda en bus y luego se puede comprar una moto, ya piensan que es otra cosa la que anda haciendo. Realmente en este país, oportunidades tenemos todos, todos tenemos oportunidades, realmente para mí, hablan de las personas que se fueron para Estados Unidos que son los héroes, yo pienso que son los héroes los que nos quedamos aquí, luchando por el país, peleando y haciendo las cosas para bien, no para mal. Mi delito es haberme quedado porque tal vez sí hubiera emigrado en el tiempo de la guerra, quizás estaría en otra forma en Estados Unidos, pero decidí pelear, luchar, y quedarme aquí en el país para donde vivo, donde me encanta y donde estoy orgulloso de haber nacido. Lastimosamente no orgulloso de querer hacer algo porque es un delito aquí no tener un apellido extranjero.
- Le reprochan, también sus nexos con Reynerio Flores (supuesto narco)
Ahora que están hablando conmigo, los van a involucrar también después a ustedes, verdad, entonces, una relación normal como cualquier persona o sea alguien que es de Santa Rosa, donde yo me muevo, con la mercadería, con los clientes, que ha quedado demostrado, entonces, no puedo encontrar un delito. Aquí estoy hablando con ustedes, yo no se a lo que ustedes después de ser periodistas se dedican, pues, sí hacen alguna... o pueden ser delincuentes, eso a mi no me consta, ni tampoco voy a venir a juzgar y prejuiciar a la demás gente por lo que es. Aparte, él está en un proceso, no se sabe si es o no es la persona que es, de la forma en que yo estoy también, y aquí me han tomado a mi como que habían agarrado... dios guarde... como sí habían agarrado a Pablo Escobar que se salió de la tumba... no sé.
- Uno de sus clientes, La Profe, tiene antecedentes de por evadir impuestos...
Ella fue cliente como en el 2003, 2004. A que ella se dedica, qué es lo que ella hace de más, o qué hace después de lo que le puedo vender, después de la labor comercial que tuvimos en un momento, no me consta, no me va, ni me interesa.
- ¿Solo es una relación comercial?
Claro, únicamente comercial, más nada. Todo amparado con sus facturas y todo.
- ¿Qué va pasar con su empresa, con Impromex?
Esperando y confiando en Dios, salir bien de la situación, primero tratar de recuperar mis cosas porque me las embargó el banco, de los 15 años de trabajo que he tenido, el banco ha embargado todas mis propiedades porque no ha habido para pagarlas. La empresa está inactiva, tratar de recuperar a los clientes para poder seguir trabajando porque tengo que vivir de algo.
- Le investigan unos depósitos en Guatemala, ¿por qué recibió dinero allá?
Esos son préstamos personales, que los dineros los ha hecho mi prima, consta en el detalle, y el otro dinero lo hizo el empleado que trabaja para Impromex, esos son los dineros de los que ellos están hablando y lo que están poniendo. Ahí no hay ninguna persona extraña de dónde ese dinero pueda venir, no puede ser un delito que yo en una emergencia venga y le preste a un familiar. Sí están en una crisis, ¿tengo que pedirle permiso a quién? Sí es mi pisto, mi dinero, el que voy a dar.
- ¿Extraña Pasaquina?
Bastante, lo añoro.
- Las autoridades sospechan de su relación de Reynerio, él operaba en esa zona...
Sí yo fuese, o hubiera temido en algún momento... hay una relación de tiempo entre (la captura) de Reynerio y Osmín. Él fue la primera semana de marzo, a mí me capturaron la primera semana de abril, sí yo algo temo, yo pongo mi barba en remojo y me voy, pero yo siempre tuve mi empresa, nunca dejé de ir a la oficina ni un día, nunca dejé de laborar, nunca dejé de hacer nada de lo normal, ¿qué iba a esconder, pues?. Sí yo no tenía nada y si yo anduviera en algo, madre, ya toparon a Neyo, yo le tengo el pisto, yo me voy, pero no.. aquí sigo en pie y voy a seguir defendiendo lo mio, al menos lo poquito que me queda ya porque el banco ya se está haciendo dueño de todas mis cosas.
- ¿Qué le han embargado?
Está en proceso de embargo, mi casa, los carros, el terreno, unos lotes.. o sea, todo, todo. Y la ropa no me la pueden quitar porque no les queda, quizás, sino se la llevaran.
- ¿Cuántos carros?
Ocho de Impromex y cinco de Inversiones OEA, que era la rentadora. Era a lo que yo me quería dedicar también, era otra cosa a lo que yo me quería dedicar como empresario, para mi, no se, pienso que empresarios son aquellos que tienen edificios y grandes, yo me considero siempre comerciante a pesar que mi rol sea empresario.
- ¿Por qué mandó a hacerse un corrido?
Nunca me mandé yo a hacerse un corrido.
- Tengo un disco con un corrido suyo...
Ese corrido... a mí me ha gustado siempre el jaripeo, verdad, entonces, tengo caballos y ese corrido lo hacen los grupos a cualquiera. Hay corridos de Menesses (ex director de la Policía), hay corridos de los alcaldes, hay corridos de los presidentes, hay corridos de los diputados. Hay corridos, pero en el corrido mio se fijaron, todos tienen un corrido y todos aquellos que tienen un caballo tienen un corrido que les gustan los caballos, que les gustan y siempre hablan de locuras, no de datos personales de uno sino que los toman de canciones o grupos de bandas norteñas.
- ¿Hablamos del de Tex Bronco?
Sí, Tex bronco, ese es, ¿verdad?
-Sí
Que en paz esté y en gloria lo tenga a Erazo a Mario, que él fue el que lo hizo, era el dueño de Tex Bronco, Mario Erazo, fue el que se lo inventó, él lo hizo y de repente cuando vengo estaba sonando en la radio. Sonó una vez en la radio y cuando lo oí le llamé y le dije: mirá Mario, ¿que pasó?... ahh, puta y no andamos en los caballos fregando.
- El corrido habla de entregas, que le temen en las fronteras...
Siempre era un rol de fregar, nada más, jamás de que yo me quiera identificar con algo así... Sí algún día logro hacer un corrido me voy a identificar con mi padre creador que es Dios, no con un corrido de machos y matones, no... dándole la gloria a Dios y siendo soldado de él. Así nada más.
- Entonces, no es un solo corrido...
No, sí hay un montón, pero uno mio, pero corridos tienen todos aquellos que van a una cabalgata, tiene Menesses, tiene el alcalde de Guazapa, tienen los alcaldes de oriente, tiene Horacio Ríos, por ejemplo, tiene la gente que tienen caballos tienen su corrido, es parte del show que va... allá viene fulano de tal en un caballo y ruunn... su corrido. Sacan de todo y es algo que se lo inventa el autor, o sea que yo, las regalías que me tuvieran que dar por ese corrido todavía no me las han dado. No me han dado nada por el derecho de autor, por las ventas millonarias no me han dado nada, jajajajajajaja.
- Entiendo...
Ojalá que realmente, lo que yo estoy diciendo, lo saquen, porque realmente sacan otra cosa. Nunca ponen las cosas como son, siempre ponen otras cosas.

Thursday, April 30, 2009

Bolaño

Y el muchacho
juega con ideas. Con ideas y con escenas detenidas.
La inmovilidad es una neblina transparente y dura
que sale de sus ojos.
Creéme: no es el amor el que va a venir,
sino la belleza con su estola de albas muertas.